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El asedio de Nelson a Santa Cruz de Tenerife

Hoy nos trasladamos hasta el 20 de julio de 1797, cuando el contralmirante británico Horacio Nelson se presenta frente a Santa Cruz de Tenerife con cuatro navíos, tres fragatas, un cutter y una bombarda.

Precisamente no venía Nelson a pasar unos días de vacaciones que digamos… Desde ese día, el inglés comienza un tremendo asedio a la ciudad. Durante cinco días el almirante intenta por todos los medios tomar la ciudad, y en la batalla incluso pierde el brazo derecho, el 25 de julio. Santa Cruz de Tenerife se defendió con uñas y dientes con sus baterías de costa.

Tanto es así que las pocas tropas que habían logrado entrar en la ciudad tuvieron que capitular. Los tinerfeños hundieron el cutter y los británicos supervivientes fueron hechos prisioneros. De aquella época aún se puede visitar el que dicen que fue el cañón que le sesgó el brazo a Nelson, el Cañón Tigre, perfectamente conservado en el Museo del Castillo de San Cristóbal, en la Plaza de España.

Este Cañón Tigre está fundido en bronce en Sevilla en 1768 y tiene unas dos toneladas de peso. Apareció por una de las troneras del Castillo de San Pedro y comenzó a hacer fuego contra los  barcos ingleses. Claro está, no se sabe con exactitud si fue este o no el cañón que hirió a Nelson, pero sí que participó en la contienda.

El primer intento de Nelson se produjo la madrugada del 22 de julio, el segundo ya en la mañana del día 22 y el tercer intento entre los días 24 y 25 de julio. En ninguno de ellos pudo lograr su objetivo el célebre navegante británico, que además salió escaldado de las escaramuzas. El propio Nelson creía que había luchado contra más de ocho mil defensores, cuando ni siquiera llegaban a los dos mil.

Cada año, durante el mes de julio, tiene lugar en Santa Cruz de Tenerife la Recreación de la Gesta del 25 de Julio, en la que soldados ataviados con las vestimentas de la época recuerdan aquella enorme victoria que la ciudad consiguió antes las tropas británicas, la que decían por aquel entonces que era la mayor potencia naval del mundo.